ANADEL

Un moderno hotel para jugar al golf

Esta situado en un sitio bastante anodino, lejos del mar y no cerca de la capital, pero tampoco lejos, aquí se viene a jugar al golf y a relajarse en la piscina poco más puedes hacer.
Como estuve hace unos meses y el tiempo era malo, necesitas coger el coche para todo, ya que lo circunda una urbanización de chalets con una pequeña zona comercial, y no hay nada más.
La habitación ha de dar a la piscina, la primera recaía sobre la entrada y el parking, y no tiene comparación, ya que las vistas sobre el jardín, el golf y la mencionada piscina son realmente bonitas.
Hay mucho extranjero que juega al golf, y la zona de spa está agradable.

El trato por parte del señor que hay en la entrada y hace de chófer entre otros menesteres hay que resaltar que es excepcional, nos llevó junto a un pequeño grupo en el minibús del hotel a ver unas cercanas cuevas, y conocerle fue un placer.

La habitación y el baño son grandes y cómodos y el desayuno aceptable.

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